"El Infierno no está abajo...

... Está en todos lados."

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Nombre: Fleyghel, al menos así se presenta.

Edad: No es realmente importante.

Género: ¿Masculino, quizá?

Especie: Demonio.

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¿A qué se dedica éste demonio?

  Fleyghel es uno de los pocos lacayos del Rey del Infierno que actúa como su "mano derecha", pero al contrario de otros, no es muy conocido por especies ajenas a lo suyo ya que prefiere permanecer así.
  En específico, él actúa como los ojos, oídos y boca de su jefe, lo que quiere decir, que lo que sea que diga, vea o escuche no puede ser mentira y todo ello se dirige directamente al Diablo. Su palabra es la última, o eso dicen algunos.
  Se encarga de que todo se cumpla al pie de la letra, por lo que si alguna criatura que sigue a su amo hace algo mal o desobecede, será castigado por Fleyghel no importa qué. Claro, que también está para observar movimientos de los demás, en especial de los enemigos.
  Él cuenta con sus propios lacayos también, pues a veces le resulta irritante tener que hacer todo sólo, por lo que quienes lo siguen se encargan de darle información de lo que esté sucediendo en todos lados y, si se los permite, pueden hacer parte de su trabajo. Ahora, ser su fiel seguidor cuenta con ciertas reglas, pero la más importante, jamás lo traiciones porque él lo sabrá... luego ya se puede imaginar lo que pasa después.

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¿Cómo es su personalidad/actitud?

  Siempre se muestra con un semblante tranquilo y respetuoso, jamás se saldría de sus casillas pues se podría decir que es muy educado, entendiendo que dejar que la furia lo consuma puede resultar en desastre para su trabajo (una vez pasó por eso). Sin embargo, no deja de intimidar, pues que sea tranquilo no quiere decir que no dé miedo, al contrario, sobre todo cuando se mantiene muy callado o su sonrisa se muestra; es señal de que algo va a hacer, y no es nada bueno.
  Tratará como lo traten, básicamente, así que si se mantiene el respeto, él no lo romperá, así sea esté hablando con el enemigo, discuta con alguien o hable con ciraturas "inferiores". No tratará a nadie como basura (aunque algunos lo sean) si se mantienen al margen. Pero hay que tener algo en claro, que él trate bien no significa que hará amigos, no está para eso... Cuanto mucho, tendrá aliados.
  Obviamente, también es fiel y servicial, sobre todo con su jefe, mas si tiene una buena vista de alguien que conoce y sabe que puede confiar, también lo será con ese alguien aunque no le dé órdenes.
  Entonces, confianza; sí es alguien de confiar a pesar de ser un demonio, ya que como se dijo anteriormente, Fleyghel no dice mentiras, es honesto sin importar la situación y si tiene que decir que matará a alguien X, se lo dirá a ese X si en el momento se encontraron. También, puede fijar y/o acordar fechas límites para algunas cosas, por lo que así puede dejar que el otro tenga tiempo para prepararse o cumplir con las órdenes (dependiendo de quiénes se esté hablando), mas en cuanto se pasa la fecha, ya no actuará con mucha cordialidad, pues lo toma como una falta de respeto.
  Por último, sí, Fleyghel es muy cruel a pesar de que no se note, y debido a que también es muy estricto, los castigos que da no son nada placenteros, así tenga que realizarlos con la criatura más inocente; si algo ha hecho mal, que le disgustara o simplemente se lo ordenen, hará lo que tenga que hacer.

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¿Cómo se le suele ver?

  Generalmente usa prendas sencillas y/o "elegantes", básicamente viste de traje, en mayoría son trajes clásicos; camisa blanca, saco/chaqueta, corbata, pantalones y zapatos negros. A veces suele llevar una fedora negra. Puede haber alguna que otra ocasión en que use colores diferentes a la gama de blanco, gris y negro, aunque siempre manteniendo colores oscuros, pues no le agradan los chillones o que se noten muy a la distancia.
  En cuanto al físico, muchos le confunden por un ángel debido al estereotipo que se tiene; cabello rubio y brilloso, en su caso lo lleva corto la gran parte del tiempo, y ojos celestes. Además de piel blanquecina, que puede verse con alguna que otra herida o cicatriz. Muy pocas veces se suele ver bien su cuerpo, y es que con los trajes lo oculta, pero está en buena forma.
  Su altura ronda el metro noventa, quizá un poco más, y su peso estaría en unos ochenta y cinco kilogramos, aunque eso es de poca importancia.

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¿Saber más...?

  Algo curioso de éste demonio es que, una vez convertido en su seguidor, se comienza a sentir su aroma que tiene un efecto agradable. Por esa misma razón, comienza a actuar como una droga y si se está mucho tiempo alejado de él, la locura empieza a tocar la puerta. Los más fuertes resisten a que su cordura se vaya, los más débiles se vuelven locos en cuanto se convierten en sus servidores, y ahí es cuando se dividen en dos grupos: los "salvajes" y los "sanos"; los salvajes son aquellos que fueron débiles, se comportan como perros con rabia y no pueden estar muy lejos de Fleyghel por lo que son los que generalmente le acompañan entre las sombras. Necesitan tanto de su esencia que si su amo toca algún objeto y deja aroma impregnado, una vez que lo deja o lo tira los lacayos comienzan a pelear a muerte por ese objeto, también buscan su aceptación y/o castigo para recibir atención. Los sanos, por otra parte, pueden alejarse cuanto deseen de Fleyghel, pero tienen tiempo limitado, aunque no es muy corto, mas si son fuertes pueden resistir bastante sin que la locura los consuma, de vez en cuando ellos también necesitan de atención. Básicamente son como mascotas para el demonio.
  Puede determinar los castigos eternos también, igual que su jefe, así que a veces disfruta de esa condición, pues gusta de ver sufrir a los demás. Algo que no se le escapa son los miedos más profundos que tienen las criaturas, por eso le es fácil determinar un castigo eterno sin necesidad de pensarlo mucho.
  No se le puede mentir a Fleyghel, sabe cuando hacen eso, además, algo en él hace que algunos digan la verdad aunque quieran mentir, simplemente les resulta imposible de tal forma que pareciera que su boca estuviera hablando por sí sola, sin ninguna orden.
  Algunos dicen que fue el Rey quien creó a Fleyghel, en un momento en el que necesitó de alguien que haga las cosas como él deseaba; otros dicen que Fleyghel antes era un ángel pero fue desterrado por sus actos atroces, por eso su apariencia. Él no afirma ni niega ninguna de las dos opciones, por lo que es difícil saber si son mentira o alguna es cierta.

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